Nuevo refuerzo de lujo para la gama media de estabilizadores de Zhiyun. La compañía asiática ha presentado hoy el Crane M3, un modelo que amplía el abanico de dispositivos de grabación que ya era capaz de soportar el Crane M2 gracias a sus motores reforzados y su estructura rediseñada.
Así, además de cámaras compactas y de acción, smartphones y cámaras sin espejo pequeñas, el nuevo estabilizador de tres ejes puede soportar configuraciones de cuerpos sin espejo de formato completo más contundentes, como la popular Sony A7S III o la Canon EOS R6. Es de hecho compatible con más del 90% de cámaras mirrorless del momento.
Todo ello con un cuerpo muy compacto (cuando está plegado es tan grande como una botella de agua de medio litro) y ligero (pesa solo 700 gramos)
Con la llegada del Crane M3 ya es posible utilizar el mismo gimbal tanto para grabar tomas con una mirrorless profesional como con una cámara de acción. Una solución cómoda y práctica, ideal para creadores de contenido de viajes, vloggers o periodistas que necesitan un equipo potente y compacto para llevar siempre encima.
Este es también el primer estabilizador de la serie Crane M que incorpora una pantalla táctil, concretamente de 1,22 pulgadas y a todo color. Un panel desde el que es posible controlar con una sola mano todos los parámetros del gimbal, así como elegir cualquiera de los seis modos de funcionamiento o consultar información como el nivel de la batería.
El Crane M3 cuenta también con una novedosa luz LED incorporada, perfecta para facilitar las grabaciones en situaciones de poca luminosidad. Este potente LED de 800 lúmenes y con un IRC (índice de reproducción cromática) de 90+ puede controlarse mediante una práctica rueda situada en el mango del gimbal con la que es posible modificar su intensidad y temperatura de color.
El nuevo estabilizador se suministra además con cuatro filtros magnéticos de color que permiten jugar con la luz y conseguir efectos creativos en los vídeos.
Otra de las novedades del Crane M3 es el módulo de expansión opcional (incluido también en el kit Pro), un dispositivo que se coloca en la base del estabilizador y que cuenta con una conexión de 6,5 milímetros para conectar un micrófono profesional, perfecto para grabar entrevistas o vlogs con sonido de alta calidad.
En la misma placa de expansión se puede también colocar el módulo Bluetooth opcional para controlar la cámara inalámbricamente.
El Crane M3 cuenta con una batería integrada que le proporciona hasta 8 horas de autonomía. Su compatibilidad con el protocolo de carga rápida PD de 12 vatios permite cargarla por completo en solo dos horas. Es posible además usar un powerbank mientras se está utilizando el estabilizador para extender el tiempo útil de la batería.
Tres configuraciones
El Crane M3 está disponible en tres configuraciones distintas. En su versión básica, que tiene un precio de 399 euros, viene acompañado de un minitrípode, los cuatro filtros magnéticos para el LED, un estuche de transporte, dos cables de carga (USB-C a micro-USB y USB-C a USB-C) y un cable de control Sony.
La configuración Combo tiene un precio de 489 euros y añade a los accesorios de la versión básica un soporte para poder usar teléfonos móviles en el gimbal y la elegante bolsa TransMount diseñada específicamente para el Crane M3.
Finalmente, el kit Pro está a la venta por 699 euros y suma a los accesorios incluidos con las dos anteriores configuraciones el módulo de expansión y el también nuevo micrófono de tipo shotgun de Zhiyun.