Un formidable arcoíris doble, y justo debajo, en el centro de la imagen, un relámpago perfectamente enmarcado.
Jason Rinehart consiguió capturar esta fascinante y bella coincidencia en Virginia, Estados Unidos, cuando de camino a su casa se dio cuenta de que una tormenta se aproximaba al lugar. Experimentado fotógrafo de esta clase de fenómenos meteorológicos, recogió su equipo (una Canon EOS 6D con un Sigma 14-24mm F2.8 DG HSM | Art) y se dirigió hacia su lugar favorito en las montañas Blue Ridge, según cuenta a Reflecta.
La lluvia se detuvo justo a tiempo cuando se formó ese arcoíris frente a él. Configuró rápidamente su equipo y empezó a disparar sin parar. “Jamás había visto un arcoíris tan increíble como este”, explica Rinehart en su cuenta de Instagram, donde esta foto ha sido aplaudida por miles de seguidores.
Fan confeso de las ópticas Sigma, el fotógrafo explica a Reflecta que este zoom gran angular “me brinda esas perspectivas únicas que siempre busco, especialmente a 14 milímetros, lo que me permite capturar toda la inmensidad del marco, de esquina a esquina”. Agrega que este es “el objetivo gran angular más nítido que he usado o tenido”. Su favorito para fotografía de paisaje.
Otra de las características que destaca Rinehart del 14-24 milímetros es el sistema de montaje de un filtro trasero: “Es ideal para una configuración rápida, ya que necesitaba centrarme en el arcoíris.”
En referencia a ese momento, Rinehart cuenta que supo “de inmediato, cuando el arcoíris empezó a crecer en el cielo, que esto iba a ser algo muy especial. He capturado arcoíris antes, pero nunca uno tan brillante y vibrante como este. El color era algo que te deja sin aliento. Como fotógrafo, saber que estás capturando algo tan especial es un sentimiento indescriptible.”
Sin embargo, no sabía que lo mejor estaba por llegar, y es que a continuación cayó del cielo un rayo perfectamente encajado bajo este bonito arcoíris.
Así lo recuerda el fotógrafo, quien asegura que únicamente dispara con objetivos Sigma: “Es mi opción para todo. Las ópticas Sigma me ayudan a ser exactamente el tipo de fotógrafo que quiero ser.”
El equipo de Rinehart está compuesto también por un Sigma 24-105mm F4 DG HSM | Art (“para largas exposiciones de light painting”) y un Sigma 35mm F1.4 DG HSM | Art (“para retrato creativo”).
Su objetivo más preciado, sin embargo, es el Sigma 70-200mm F2.8 DG OS HSM | Sports: “Es una de esas ópticas que digo a otros fotógrafos que prueben al menos una vez, porque es absolutamente increíble”.
Foto de cabecera: el relámpago enmarcado bajo un arcoíris doble que capturó Jason Rinehart.
