Nanuk ha renovado su amplísimo catálogo de maletas rígidas de gama alta con una innovadora colección de modelos cuya carcasa está compuesta por un 95% de resina reciclada posconsumo. Se trata de Nanuk-R, una serie concebida para “reducir los residuos y fomentar un enfoque más responsable en la protección de los equipos”, según explica el presidente y director ejecutivo de la firma canadiense, José Chagnon.
La gama Nanuk-R está compuesta por seis maletas negras de diferentes tamaños que van desde los 3,1 litros de capacidad de la más pequeña (Nanuk-R 904) hasta los 28,5 de la más grande (Nanuk-R 935).
Con el lanzamiento de esta nueva gama, Nanuk se convierte en la primera marca en ofrecer maletas rígidas de gama alta fabricadas con resina reciclada posconsumo.
Sostenibilidad y garantía de por vida
“Creemos firmemente que calidad y sostenibilidad pueden ir de la mano. Si bien mantenemos el mismo nivel de protección, durabilidad y funcionalidad, estamos dando un paso significativo hacia la reducción de nuestra huella de carbono”, sostiene Nanuk en su web.
Al igual que el resto de modelos de su catálogo, cada una de las maletas de la serie R de Nanuk se somete a un estricto control de calidad y cuenta con una garantía de por vida.
Resistentes al agua, el polvo, las caídas y las temperaturas extremas, estas maletas cuentan con las mismas certificaciones que el resto de modelos del amplio catálogo de Nanuk, fabricados en ese caso con material virgen.
Las nuevas maletas incluyen por tanto las prestaciones habituales en Nanuk, como un asa ergonómica, una válvula de autopresión integrada y un exclusivo mecanismo de cierre y bloqueo, características que las hacen ideales para el transporte seguro de equipos de grabación (cámaras, objetivos, etcétera) y cualquier otro tipo de material sensible.
Resina reciclada posconsumo
La resina reciclada posconsumo con la que están construidas las maletas de la serie R es un material creado a partir del polipropileno reciclado recuperado a partir de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos para ser transformado en resina de alta calidad.
Desde la clasificación de la materia prima hasta la síntesis de la resina, el proceso de fabricación de este material implica un estricto control de calidad para lograr una resina termoplástica que, según Nanuk, “redefine las capacidades de los plásticos posconsumo”.
Gracias al empleo de polipropileno 100% reciclado, la resina utilizada para la producción de las maletas de la serie R cuenta con el mismo rendimiento mecánico, resistencia al desgaste y apariencia que la resina fabricada con polipropileno virgen.
Protección del medioambiente
“Cada maleta de esta colección es un paso hacia un mundo más limpio que ayuda a desviar los residuos de los vertederos y reducir la contaminación ambiental”, afirma Nanuk.
Y es que el uso de resina reciclada proporciona múltiples ventajas al medioambiente, como la conservación de los recursos, el ahorro de energía, la reducción de la huella de carbono y la promoción de la economía circular.